Le atrapó por sorpresa el revés de la vida
cuando apenas la treintena asomaba a sus zapatos.
Un mal sueño, pensaba, demasiado largo
demasiado acibarado, demasiado nebloso
demasiado ....
Durante años el viento fue soplando de frente,
embestía de cara sin poder avanzar
furiosas tormentas
revelaban un panorama sombrío
intentando abatirla en el camino.
Era una débil rama apuntalada en la tierra
desafiando infortunios, redimiendo barreras
combatiendo con ira su destino
luchando por sobrevivir..
La frágil rama se convirtió en sólido tronco
cubierto de estigmas de complejas cortezas.
sus generosas ramas cobijaban un bello pajarillo,
iba de rama en rama revelando salidas.
Subió a la copa más alta descubriendo nuevos paisajes
sus alas temblorosas, pero resueltas,
se abrieron
majestuosamente
abrazó al árbol protector y alzó el vuelo.
Atravesó mares y tierras a rumbos desconocidos
le acompañaron soles y tormentas,
noches sin luna, lunas llenas .....
Encontró otras ramas con brillos de sol
en cálidos climas que acariciaban sus plumas.
Desde esta orilla el viejo árbol te susurrará sobre las
hojas
extenderá sus ramas empujadas por un leve viento
y se deslizará por los rayos de la luna
para llegar a tu paraíso y besarte.
Mercedes Pérez
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