(Homenaje al poeta
LUIS ROSALES y su obra:
LA CASA ENCENDIDA)
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Y quien te quiere Luis,
dejaste LA CASA ENCENDIDA,
siempre palpitante y viva,
llena de plenitud siempre,
siempre con la esperanza colgada en los aleros,
descubriendo humanidades y atornillando soledades
que quedaron desprendidas en tránsitos y devaneos.
dejaste LA CASA ENCENDIDA,
siempre palpitante y viva,
llena de plenitud siempre,
siempre con la esperanza colgada en los aleros,
descubriendo humanidades y atornillando soledades
que quedaron desprendidas en tránsitos y devaneos.
Como expusiste:
(1) “EL MUNDO SIGUE SIENDO UNA CREACIÓN ABIERTA”
y es cierto Luis,
tu habilitaste el camino
de esa casa tan viva,
y así la creación parece menos fiera cuando lo cantas.
(1) “EL MUNDO SIGUE SIENDO UNA CREACIÓN ABIERTA”
y es cierto Luis,
tu habilitaste el camino
de esa casa tan viva,
y así la creación parece menos fiera cuando lo cantas.
Cuando coreas esa canción
(2) DE LA DULZURA IRRESTAÑABLE,
parece que el mundo ensanchara,
distribuyera y ensanchara,
con una brillazón que hace llover los adentros,
que hace que uno se desvanezca
y se adentre en esa luz anterior al hombre,
que al recobrarse,
despierta esa alegría de
saberse un corazón más grande,
con esa claridad que tu despiertas en tus versos.
(2) DE LA DULZURA IRRESTAÑABLE,
parece que el mundo ensanchara,
distribuyera y ensanchara,
con una brillazón que hace llover los adentros,
que hace que uno se desvanezca
y se adentre en esa luz anterior al hombre,
que al recobrarse,
despierta esa alegría de
saberse un corazón más grande,
con esa claridad que tu despiertas en tus versos.
Alma engalanada,
delicada dulzura batiendo el mundo.
delicada dulzura batiendo el mundo.
Se te quedó la vida antigua Luis,
desmoronando soledades,
escuchando dolor en hemorragias,
tu voz sigue latiendo,
latiendo con un engranaje inacabable,
como un dispositivo que sigue y sigue caminando,
caminando latidos,
latidos y palabras,
palabras y latidos.
desmoronando soledades,
escuchando dolor en hemorragias,
tu voz sigue latiendo,
latiendo con un engranaje inacabable,
como un dispositivo que sigue y sigue caminando,
caminando latidos,
latidos y palabras,
palabras y latidos.
Como enredadera asciendes
y te enmarañas en mis venas,
haciéndome creer que no estoy sola,
y poblándome de voces que alegrean,
me levanto cual ave cuando hiela repetido,
cuando hiela repetido en otras voces.
y te enmarañas en mis venas,
haciéndome creer que no estoy sola,
y poblándome de voces que alegrean,
me levanto cual ave cuando hiela repetido,
cuando hiela repetido en otras voces.
Gracias Luis,
la casa sigue encendida.
la casa sigue encendida.
(1-2 Luis Rosales)
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